La herencia yacente es aquella que no ha sido aceptada por ningún heredero dentro de un plazo de 15 días luego del fallecimiento de una persona. Es decir, es una especie de «estado de espera» de la herencia, donde los bienes del fallecido no tienen un dueño definido aún.
¿Por qué ocurre?
Existen varias razones por las que una herencia puede quedar yacente:
- Desconocimiento de los herederos: A veces, los herederos no saben que tienen derecho a la herencia o desconocen el fallecimiento del causante.
- Desacuerdo entre los herederos: Los posibles herederos pueden tener desacuerdos sobre la división de los bienes, lo que retrasa la aceptación de la herencia.
- Renuncia a la herencia: Algunos herederos pueden decidir renunciar a su parte de la herencia por diversas razones.
¿Qué sucede con los bienes de la herencia en estos casos?
Mientras la herencia permanece yacente, se puede solicitar a un juez civil que se declare este estado, y los bienes del fallecido quedan bajo la administración de un curador. Este curador tiene la función de:
- Conservar los bienes: Debe cuidar y proteger los bienes de la herencia para evitar que se deterioren o se pierdan.
- Pagar las deudas del fallecido: Si existen deudas, el curador debe pagarlas con los bienes de la herencia.
¿Cómo termina?
- Aceptación de la herencia: Si uno o más herederos aceptan la herencia, esta deja de ser yacente y los bienes se dividen entre ellos.
- Declaración de herencia vacante: Si transcurre un tiempo considerable sin que nadie reclame la herencia, esta puede ser declarada vacante y los bienes pasan al Fisco.
¿Por qué es importante conocer el concepto de herencia yacente?
- Protección de los bienes: La figura de la herencia yacente garantiza que los bienes del fallecido sean cuidados mientras no haya un dueño definido.
- Cumplimiento de obligaciones: Asegura que las deudas del fallecido sean pagadas.
¿Qué hacer si te encuentras ante una herencia yacente?
Cuando se cumplen las condiciones señaladas anteriormente, un juez puede declarar que la herencia está yacente, lo que significa que los bienes y asuntos relacionados con la herencia están en un estado de espera, sin un administrador o heredero confirmado. Esto se hace para resolver situaciones en las que no está claro quién debe encargarse de la herencia y cómo deben distribuirse los bienes.
Efectos de la declaración de herencia yacente
- Durante la yacencia, los bienes pueden ser administrados por un albacea o un curador de bienes yacentes designado por un juez y sólo se permiten actos de administración y conservación de los bienes.
- Los acreedores del difunto pueden reclamar el pago de sus créditos y solicitar medidas precautorias durante la yacencia.
- En ausencia de herederos conocidos, el Fisco puede intervenir para asegurar la administración de los bienes del difunto. Eventualmente, si no se presentan herederos legítimos, el Estado puede asumir la propiedad de los bienes heredados.